Miguel Ibáñez nació en Puente Viesgo (España) en 1960. Estudió Filología Hispánica y trabaja como profesor de Lengua y Literatura. Ha vivido en Barcelona y Madrid y actualmente reside en Santander, que es una ciudad deliciosamente burguesa en donde uno aún puede llevar una vida mediocre, sosegada y con tiempo para escribir.

               Hasta ahora ha publicado poesía, sobre todo, aunque últimamente le interesa más el relato. Él dice que ha sufrido una evolución natural de la poesía a la prosa, pero lo cierto es que la poesía le abandonó, por las buenas.

               Obtuvo en 1993 el premio de Poesía José Hierro, convocado por el Ayuntamiento de Santander, por su libro Doce poemas para pasar el tiempo, y ha sido finalista en el certamen poético Jara Carrillo, del Ayuntamiento de Alcantarilla (Murcia).

               Como escritor de relatos ha sido seleccionado para su publicación en la edición del consurso literario Eau de Rochas (Madrid, 2000) y la del certamen literario Transeúntes (León, 2000)

               Ha publicado poesía y relatos en varias antologías: Poetas en el aula (Santander, 1996), Mar de fondo (Santander, 1998), La isla de los ratones (Santander, 1999), Solsticio (Torrelavega, 2000), La esquina azul del tiempo (Santander, 2000), Norte y sur de la poesía española contemporánea (Santander, 2000)

               También ha colaborado en diversas revistas literarias: La ortiga, (H)ala, Ultramar, Componente norte...

               Cree que la literatura del futuro saldrá de la mezcla de tres elementos: ironía, concisión e imaginación. Pero eso ya lo dijo Italo Calvino antes que él, así que sus profecías no tienen mayor mérito.

 

Publica por primera vez en Ficticia el: 06/Abr/01